sábado, 19 de noviembre de 2011

La información que se incluye a continuación ha sido recogida de la página web del Ministerio de Educacion y Cultura


El sistema educativo español comprende enseñanzas de régimen general y enseñanzas de régimen especial.


Las enseñanzas de régimen general se ordenan de la siguiente forma:


Educación infantil.
Educación primaria.
Educación secundaria, que comprende la educación secundaria obligatoria, el bachillerato y la formación profesional de grado medio.
Formación profesional de grado superior.
Educación universitaria.
Son enseñanzas de régimen especial las siguientes:


  1. Las enseñanzas artísticas.
  2. Las enseñanzas de idiomas.


EDUCACIÓN INFANTIL


La educación infantil, que comprende hasta los seis años de edad, contribuye al desarrollo físico, intelectual, afectivo, social y moral de los niños. La educación infantil comprende dos ciclos. El primer ciclo se extiende hasta los tres años, y el segundo, desde los tres hasta los seis años de edad.


EDUCACIÓN PRIMARIA


La educación primaria comprende seis cursos académicos de 6 a 12 años, organizado en tres ciclos de dos años cada uno. Es una etapa educativa obligatoria y gratuíta. Su finalidad es promover la socialización de los niños y niñas, favorecer su incorporación a la cultura y contribuir a la progresiva autonomía de acción en su medio. La educación se organiza en Areas impartidas por Maestros/as.


EDUCACIÓN SECUNDARIA OBLIGATORIA


La ESO es una nueva etapa educativa (obligatoria y gratuita) para todos los ciudadanos y ciudadanas en edad escolar, ha sustituido a los dos últimos años de la E.G.B. (7º y 8º ) y los dos primeros de las Enseñanzas Medias (1º y 2º de B.U.P. o de F.P). Por los tanto se extiende a lo largo de cuatro años después de la etapa de EDUCACION PRIMARIA. Proporciona la formación necesaria para proseguir estudios tanto de Bachillerato como de Formación Profesional de grado medio. El alumnado comienza esta etapa a los doce años y la finaliza a los dieciséis. El objeto del diseño de esta nueva etapa educativa radica básicamente en ampliar la educación obligatoria hasta los dieciséis años a fin de adecuarla a la edad laboral inicial de cualquier ciudadano español y equiparar el Sistema Educativo español con los de los paises de la U.E.


EL BACHILLERATO L.O.G.S.E.


El Bachillerato es la última etapa de la Educación Secundaria, tiene carácter voluntario y su duración es de dos cursos, normalmente entre los 16 y los 18 años. El Bachillerato tiene cuatro modalidades diferentes, que se han establecido para atender tanto a la diversidad de estudios posteriores como a la variedad de intereses, capacidades y actitudes que poseen los jóvenes de estas edades. Las cuatro modalidades son las siguientes: Artes; Ciencias de la Naturaleza y de la Salud; Humanidades y Ciencias Sociales; Tecnología.


LA FORMACIÓN PROFESIONAL


La formación profesional, en el ámbito del sistema educativo, tiene como finalidad la preparación de los alumnos para la actividad en un campo profesional, proporcionándoles una formación polivalente que les permita adaptarse a las modificaciones laborales que puedan producirse a lo largo de su vida. Incluye tanto la formación profesional de base como la formación profesional específica de grado medio y de grado superior.


LAS ENSEÑANZAS ARTISTICAS


Las enseñanzas artísticas tienen como finalidad proporcionar a los alumnos una formación artística de calidad y garantiza la cualificación de los futuros profesionales de la música, la danza, el arte dramático, las artes plásticas y el diseño.


Música y Danza


Las enseñanzas de música y danza comprenden tres grados:


Grado elemental, de cuatro años de duración.
Grado medio, que se estructura en tres ciclos de dos cursos académicos de duración cada uno.
Grado superior, que comprende un solo ciclo cuya duración se determina en función de las características de estas enseñanzas.
Grado Elemental
Para el grado elemental de las enseñanzas de música y danza se establecen por parte de las Administraciones educativas criterios de ingreso que tienen en cuenta, entre otras circunstancias, la edad idónea para estas enseñanzas.


Grado Medio


Para acceder al grado medio de las enseñanzas de música y danza es preciso superar una prueba específica de acceso. La superación del tercer ciclo del grado medio de música o danza dá derecho al título profesional de la enseñanza correspondiente.


Grado Superior


Se accederá al grado superior de las enseñanzas de música y danza si se reúnen los siguientes requisitos:


Estar en posesión del título de Bachiller.
Haber aprobado los estudios correspondientes al tercer ciclo de grado medio.
Haber superado la prueba específica de acceso que establezca el Gobierno, en la cual deberá demostrar el aspirante los conocimientos y habilidades profesionales necesarios para cursar con aprovechamiento las enseñanzas correspondientes.
Quienes han cursado satisfactoriamente el grado superior de dichas enseñanzas tienen derecho al título superior en la especialidad correspondiente, equivalente, a todos los efectos, al título de Licenciado Universitario.


Arte Dramático


Las enseñanzas de arte dramático comprenderán un solo grado de carácter superior, de duración adaptada a las características de estas enseñanzas. Para acceder a las enseñanzas de arte dramático es preciso:


Estar en posesión del título de Bachiller.
Haber superado la prueba específica que al efecto establezca el Gobierno y que valorará la madurez, los conocimientos y las aptitudes necesarias para cursar con aprovechamiento estas enseñanzas.
Quienes han superado las enseñanzas de arte dramático tienen derecho al título Superior de Arte Dramático, equivalente, a todos los efectos, al título de Licenciado Universitario.


Artes Plásticas y de Diseño


Las enseñanzas de las artes plásticas y de diseño comprenden estudios relacionados con las artes aplicadas, los oficios artísticos, el diseño de sus diversas modalidades y la conservación y restauración de bienes culturales.


Para acceder a los ciclos de grado medio propios de las enseñanzas de artes plásticas y diseño es necesario, además de estar en posesión del título de Graduado en Educación Secundaria, acreditar las aptitudes necesarias mediante la superación de las pruebas que se establezcan.


Pueden acceder a los ciclos de grado superior de estas enseñanzas quienes están en posesión del título de Bachiller y han superado las pruebas establecidas. Los estudios correspondientes a la especialidad de Conservación y Restauración de Bienes Culturales tienen la consideración de estudios superiores. Los alumnos que han superado dichos estudios obtienen el título de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, que es equivalente, a todos los efectos, al título de Diplomado Universitario.


Tienen la consideración de estudios superiores las enseñanzas de diseño. Al término de dichos estudios se otorga el título de Diseño en la especialidad correspondiente, que es equivalente, a todos los efectos, al título de Diplomado Universitario.


IDIOMAS


Las enseñanzas de idiomas se imparten en las Escuelas Oficiales. Para acceder a las enseñanzas de las Escuelas Oficiales de Idiomas es requisito imprescindible haber cursado el primer ciclo de la enseñanza secundaria obligatoria o estar en posesión del título de Graduado Escolar, del certificado de escolaridad o de estudios primarios.


ENSEÑANZA UNIVERSITARIA


Las enseñanzas universitarias se organizan en ciclos. Existen tres modelos:


Enseñanzas de primer ciclo con clara orientación profesional que actualmente carecen de continuidad en segundo ciclo (Biblioteconomía, Enfermería, etc.). Tienen una duración de tres años, con una carga lectivo no inferior a 180 créditos. Las titulaciones de primer ciclo se denominan Diplomatura, Arquitectura Técnica o Ingeniería Técnica.
Enseñanzas de dos ciclos sin titulación intermedia. En este caso las enseñanzas se ordenan por ciclos pero la superación del primero no da derecho a la obtención de ningún título, por cuanto no supone un ciclo completo de formación académica ni otorga una cualificación profesional específica (Veterinaria, Medicina, etc...). Pueden tener una duración entre cuatro y cinco años, con una carga lectiva no inferior a 300 créditos.
Enseñanzas de dos ciclos con título intermedio. En este caso el primer ciclo conducirá a la obtención del título de Diplomado, Ingeniero Técnico o Arquitecto Técnico, pudiendo continuar el segundo ciclo para obtener el título de Licenciado, Ingeniero o Arquitecto.
El Sistema Universitario Español


El sistema universitario español comprende 49 Universidades públicas, 14 Universidades privadas y 4 Universidades de la Iglesia Católica.


El contenido de la autonomía universitaria se concreta en el art. 3 de la Ley Orgánica de Reforma Universitaria de 1983, y comprende la elaboración de sus Estatutos y otras normas de funcionamiento interno; la elección, designación y remoción de sus órganos de gobierno y administración; la elaboración, aprobación y gestión de sus presupuestos, la administración de sus bienes; el establecimiento y modificación de sus plantillas; la selección, formación y promoción del personal docente e investigador y de administración y servicios; la elaboración y aprobación de los planes de estudio e investigación; la admisión, régimen de permanencia y verificación de conocimientos de los estudiantes; la expedición de títulos y diplomas; …etc.


Precisamente, por este carácter de entidades autónomas de derecho público, las Universidades establecen su propia oferta académica que puede ser de dos tipos:




  1. Títulos oficiales con validez en todo el territorio del Estado
  2. Títulos propios de cada Universidad
  3. A propuesta del Consejo de Universidades, el Gobierno establece los títulos oficiales y las directrices generales propias de estas titulaciones, es decir, el contenido mínimo homogéneo que debe incluirse en los planes de estudio. Son las denominadas materias troncales.




Las Universidades elaboran y aprueban sus propios planes de estudio que comprenden, además de las materias troncales, las materias obligatorias de esa universidad, las materias optativas para el alumno, y materias de libre configuración, es decir, elegidas por el estudiante.


Los planes de estudios de títulos oficiales aprobados por las Universidades deben ser homologados por el Consejo de Universidades para su validez. Asimismo, la Universidades en uso de su autonomía, pueden impartir enseñanzas conducentes a la obtención de otros diplomas y títulos propios. Los cuales sin embargo, carecen de los efectos académicos plenos y de la habilitación para el ejercicio profesional de los títulos universitarios de carácter oficial y validez en todo el territorio nacional.


Sistema de Enseñanza y Métodos de Evaluación


El sistema de enseñanza comprende tanto clases teóricas como seminarios y prácticas tutorizadas. La asistencia a clase, aunque no obligatoria, constituye un elemento fundamental de la formación universitaria. Las clases duran de 50-60min y los profesores profundizan en los temas tratados apoyándose habitualmente en métodos audiovisuales.


La evaluación de los alumnos se lleva a cabo mediante la realización de una evaluación final en la Convocatoria Ordinaria de febrero, si la asignatura es cuatrimestral, o de junio, si es anual o cuatrimestral del 2º; cuatrimestre. Los alumnos que no superen la evaluación en Convocatoria Ordinaria pueden hacer uso de una Convocatoria Extraordinaria en septiembre. En algunos casos los profesores pueden optar por realizar varias evaluaciones (exámenes, trabajos, etc.) a lo largo del curso cuya superación puede liberar de la realización del examen final.


SISTEMA DE CALIFICACIONES


Las calificaciones se otorgan según la puntuación obtenida sobre base 10:




  • 0,0 - 4,9 SUSPENSO (SS)
  • 5,0 - 6,9 APROBADO (AP)
  • 7,0 - 8,9 NOTABLE (NT)
  • 9,0 - 10,0 SOBRESALIENTE (SB)
  • 9,6 - 10,0 MATRÍCULA DE HONOR (MH)




La escala de grados ECTS ha sido establecida de la siguiente manera:




  • A - EXCELLENT: Realización extraordinaria con tan sólo errores menores
  • B - VERY GOOD: Sobre la media pero con algunos errores
  • C - GOOD: Buen trabajo en general con algunos errores notables
  • D - SATISFACTORY: Bien pero con carencias significativas
  • E - SUFFICIENT: La realización alcanza el criterio mínimo
  • FX- FAIL: Es necesario algo más de trabajo para conceder los créditos
  • F - FAIL: Es necesario mucho más trabajo




Equivalencia con el sistema europeo ECTS. Aproximadamente la equivalencia en nota numérica según la escala sobre 10 española corresponde a los grados ECTS:




  • 9,6-10 MH Matrícula de Honor = A (EXCELLENT)
  • 9,0-10,0 SB Sobresaliente = B (VERY GOOD)
  • 7,0-8,9 NT Notable = C (GOOD)
  • 6,0-6,9 AP Aprobado = D (SATISFACTORY)
  • 5,0-5,9 AP Aprobado = E (SUFFICIENT)
  • 3,0-4,9 SS Suspenso = F (FAIL)
  • 0-3,0 SS Suspenso = FX (FAIL)

jueves, 10 de noviembre de 2011

Educación en la Edad Media

El cristianismo con su poder divino se había encargado de transformar el mundo antiguo en mundo nuevo, y pronto hizo sentir su influjo por todas partes y en todas las cosas. La educación y la instrucción recibieron grande impulso, y presentaron nueva faz conforme con el destino presente y futuro del hombre. No faltó quien pretendiese que donde está la fe la ciencia es inútil; pero no hallaron eco semejantes doctrinas, porque contaba la Iglesia con muchos hombres distinguidos que al abandonar el paganismo conservaban la afición a los estudios científicos, y porque los padres de la Iglesia de mas renombre, como san Clemente de Alejandría, san Crisóstemo, san Gregorio Nacianceno, san Agustín, san Gerónimo y otros, defendían con todo su poder los fueros de la ciencia. La escuela de Alejandría y las de los catequistas, de que ya hemos hablado en los artículos respectivos, vienen en apoyo de esta aserción. Más en el primer periodo del cristianismo la educación pagana marchaba al nivel de de los cristianos próximamente.
Las cosas sin embargo no podían permanecer largo tiempo en semejante estado, pues el espíritu del Evangelio penetraba en la sociedad, y a medida que se extendían sus saludables doctrinas, las escuelas y establecimientos paganos debían someterse, por fin, a la cultura cristiana. A pesar de todo, semejantes establecimientos se hubieran sostenido por mas largo tiempo, y la transformación se hubiera verificado de distinto modo, sin la emigración de los pueblos. Desde el siglo IV hasta el VI fueron inundadas por los bárbaros casi todas las provincias romanas. Reinaba la desolación por doquiera; a los males que procedían de fuera se agregaban los que eran efecto de las particiones del imperio, de las guerras contra los usurpadores, de impuestos insoportables y de la manera de recaudarlos. Las necesidades, del presente, la incertidumbre del porvenir, que a todos angustiaba, entorpecían los progresos de las ciencias aun en los intervalos de la paz. La escasez del tesoro público no permitía a los emperadores sostener los establecimientos de educación; los pueblos carecían de los medios necesarios de atender a tales servicios y las escuelas desaparecieron insensiblemente. Sin embargo, los hijos de los cristianos debían instruirse en la religión, y los que aspiraban al estado eclesiástico debían prepararse también para su carrera. Esta necesidad, a que se agregan las pacificas relaciones de los bárbaros con los cristianos después de las primeras contiendas, contribuyó a que los intereses de la civilización estuvieran en manos del clero desde el siglo IX hasta el VI. Este orden de cosas, que fue un bien inmenso, perjudicó sin embargo al progreso de las ciencias, porque todas las escuelas se impregnaron del carácter teológico, los conocimientos humanos se modularon en un todo a la fe de la Iglesia, y se estableció completamente el despotismo intelectual. Todas las ciencias se redujeron altrivium y al quadrivum, de que hablaremos con más extensión en los artículos respectivos; es decir, se redujeron a la gramática, la dialéctica, la retórica, la música, la aritmética, la geometría y la astronomía, que constituyeron la instrucción del occidente por largo tiempo.
El influjo del cristianismo disponía a pensar en las cosas del cielo, a penetrarse del espíritu de amor y a avanzar en el terreno de la verdad. La Iglesia con su disciplina destruía insensiblemente las costumbres brutales, haciendo que el espíritu predominase a las fuerzas y agilidad del cuerpo. Todas estas circunstancias y el espirito caballeresco que se desarrolló más tarde, contribuyeron en gran manera a los progresos de la civilización en aquella época.
Durante este tiempo se ensanchaba la instrucción en las escuelas sobre todo, en las del orden de san Benito, y particularmente en Irlanda, Escocia e Inglaterra. La reputación de las escuelas de Irlanda se extendió por todas partes, de suerte que acudían muchos alumnos del continente a instruirse en ellas en la Biblia. Los conventos de Escocia e Inglaterra participaron pronto de la misma gloria, de suerte que mientras crecía la barbarie en otros países, se refugiaban las ciencias a los conventos de las islas Británicas.
Por el mismo tiempo el obispo de Mea, Crodegando» sujetó al clero a una regla parecida a la de san Benito, la cual facilitó extraordinariamente la creación de escuelas. Por este medio Carlomagno y aun sucesores pudieron establecerlas, no solo en los conventos, sino donde quiera que se hallase un clero numeroso especialmente en la residencia de los obispos.
Persuadido Carlomagno de que el poder de los estados se funda en la moralidad y la inteligencia de loa súbditos, se ocupó en civilizar a estos. Logró despertar en muchos puntos, la necesidad de una instrucción superior, y tiene derecho, por este y otros resultados no menos brillantes de sus esfuerzos, a que se le considere como el restaurador de las ciencias en la Europa occidental. Llamó a la corte a los hombres más distinguidos de su época, procuró instruirse él mismo, y en medio de los grandes cuidados del imperio se ocupaba también en los trabajos científicos; hizo un ensayo de gramática de su Idioma, y formó unas tablas astronómicas que fueron la admiración de Alcuino. En sus viajes inspeccionaba las escuelas e interrogaba  a los  niños, demostrando en su conducta que no aspiraba con esto a una vana gloria.
Carlomagno fundó en sus estados tres especies de establecimientos de instrucción: escuelas para el pueblo, escuelas superiores y seminarios de música. En las escuelas populares aprendían los niños a leer, escribir y contar. Teodulfo, obispo de Orleans, hizo establecer escuelas de esta clase en todos los pueblos de sus diócesis, disponiendo que la enseñanza fuese gratuita, a fin de que hasta los más pobres pudieran adquirir la instrucción necesaria a los ciudadanos. De los establecimientos superiores, el mas antiguo es la escuela de la corte (Schola Palatina). Este establecimiento, anterior a Carlomagno, no principió a florecer hasta el tiempo de Alcuino, llamado a Francia por el renombre que había adquirido y que había llegado a noticia del emperador. Alcuino eligió hombres capaces de elevar la institución, pero no introdujo nuevos métodos ni ensanchó la enseñanza. Los seminarios destinados a formar cantores para las iglesias, se crearon en Mez y Soisson, poniendo al frente de estos establecimientos a Teodor y Benito, hombres aventajados en la música, y que fueron indicados al emperador por Adriano.
Luís el Piadoso siguió el ejemplo de su ilustre progenitor, pero carecía de la firmeza necesaria para hacer prevalecer su voluntad sobre la del clero; así que se entibió el celo de éste y desaparecieron insensiblemente o quedaron reducidas a elementales todas las escuelas que profesaban las siete artes liberales, hasta el siglo VIII, en el cual recibieron las ciencias nuevo impulso con la elevación de Hugo Capeto al trono.
En Alemania, donde Bonifacio había preparado los espíritus, obtuvieron excelentes resultados los esfuerzos de Carlomagno. Prosperaron primero las escuelas de los conventos y luego quedaron mucho más atrás que las de las catedrales. En los siglos IX y X ningún país de la Europa occidental contaba tantos abades y obispos sabios como Alemania; en ninguna parte se exigían tantos conocimientos a los eclesiásticos, y en país otro alguno se interesaba más la nobleza por los progresos de las ciencias. En tiempo de Othon, las relaciones con Italia sostuvieron el impulso que se había dado al saber, y desde su tiempo empezó a estudiarse el griego. Solo Inglaterra podía compararse ventajosamente con Alemania en aquella época, porque cuando parecía abandonada en Alemania la idea de Carlomagno de ilustrar a la masa del pueblo, la realizó Alfredo el Grande en Inglaterra, de que son una prueba evidente los progresos de la lengua nacional bajo su gobierno. No duraron sin embargo largos años aquellos dichosos tiempos, ni para uno, ni para otro país. Sustrajéronse los conventos de la vigilancia de los obispos, y desde entonces, a medida que se enriquecían, se introdujo entre los monjes una vida poco a propósito para los estudios, perdieron insensiblemente la afición a las ciencias, y sus escuelas decayeron completamente. Las de las catedrales no tuvieron mejor suerte, sobre todo desde que los canónigos de Treveris rompieron el lazo canonical con aprobación del obispo. Seguido generalmente este ejemplo, se dispersaron los canónigos y desaparecieron sus escuelas. Esta decadencia fue acaso también debida en parte a la fundación de las universidades, a la actividad que empezaba a experimentarse en las ciudades, para la cual eran ya insuficientes las escuelas de aquella época.
A medida que se desarrollaban las relaciones sociales y políticas de los pueblos, y que se conocía la civilización de otros países, no podía satisfacer la instrucción de las escuelas eclesiásticas. Entonces, con la participación de los príncipes y magnates, se reunieron hombres ilustrados y jóvenes entusiastas que no pertenecían al clero, con objeto de suplir a lo que faltaba en las escuelas de éste. Algunas de las escuelas fundadas por estas sociedades existían ya en los siglos XI y XII, pero solo obtuvieron privilegios en el siglo XIII, como la escuela de medicina de Salerno, la de derecho de Bolonia y la de teología de París. En estas escuelas fue ampliándose gradualmente la enseñanza, hasta la fundación de las universidades, que hicieron grandes servicios en todos los países y acabaron con las antiguas escuelas.
Los franciscanos y dominicos establecieron también escuelas en la edad media para los aspirantes a la orden, y otras distintas para cuantos querían frecuentarlas. Escribieron también algunas obras superiores a las empleadas hasta entonces, y como, sus escuelas estaban en las ciudades, quedaron desiertas las de los benedictinos, aunque las de estos eran superiores.
Desde el siglo XII se establecieron escuelas en los pueblos bajo la vigilancia de las autoridades locales. Estas escuelas sin embargo no diferían gran cosa de las de los conventos, pues que estaban reducidas al estudio de memoria, a causa del grande precio de los libros y el papel. El maestro, auxiliado a veces por los discípulos de mayor edad, recitaba la lección hasta que la mayoría la aprendía de memoria y la explicaba después bien o mal. Cuando disminuyó el precio del papel, se adoptó el método del dictado. En suma, no diferían estas escuelas de las del clero sino en la forma exterior, y servían asimismo, por lo común, para formar eclesiásticos. Decidida la creación de una escuela, se construía un edificio, se fijaba la dotación del maestro y la retribución de los niños, y se nombraba un rector de entre el clero, y la autoridad civil no se cuidaba más de la escuela. Entonces el rector nombraba auxiliares pertenecientes también al clero, y estos eran los encargados de la enseñanza. En el siglo XIV los discípulos de más edad viajaban para frecuentar diversos establecimientos, y esta costumbre, que al principio tuvo por objeto adquirir una educación más esmerada, degeneró por último en una vida vagabunda; así que estas escuelas destruyeron las de los conventos sin contribuir en nada a los progresos de las ciencias. La educación de la masa del pueblo en aquellos tiempos era casi nula. Los estudios clásicos introdujeron después cierta libertad de espíritu, y con ella cambios notables en la educación y enseñanza, los cuáles bajo el influjo del cristianismo prepararon los progresos del porvenir.
Tal es el ligero bosquejo del estado de la educación durante la edad media en Europa. No concluiremos sin embargo sin hacer mención honorífica de Lotario y de los papas Eugenio II y León IV, que hicieron tan grandes esfuerzos, aunque infructuosos, en Italia por la creación de escuelas, y sin recordar el influjo de la cultura de los árabes y del imperio de oriente y de nuestra patria en la civilización de Europa occidental durante la edad media por más que consagremos artículos especiales a este asunto en el Diccionario.


miércoles, 2 de noviembre de 2011

Educación en la Edad Antigua (Grecia)

Educación en Grecia 

En Grecia, como en la mayor parte del mundo antiguo, la educación estaba reservada únicamente para los niños, y no para las niñas, y sólo para los que por su riqueza pudieran permitírselo. Es decir, aquellas familias que no podían prescindir del hijo para trabajar, o que no podían pagar a un maestro, no tenían acceso a la educación


La escuela estaba en la propia casa del maestro. Allí se sentaban en taburetes y escribían en tablillas de madera encerada mediante “estilos”, una especie de lápiz con un extremo acabado en punta y otro aplastado, para poder borrar lo escrito. Sólo en ocasiones especiales escribían con pluma de caña y tinta sobre papiro (material fabricado a partir de la planta del mismo nombre, tan famosa en Egipto) Los libros estaban también fabricados con ese material que, a diferencia de los nuestros, no se encuaderna, sino que se enrollaba. El papiro más largo encontrado mide más de 40 metros.


Se les enseñaba a leer y escribir, y las reglas básicas de la aritmética. Era muy importante que aprendieran de memoria versos del poeta Homero (el padre de la literatura griega) y supieran recitarlos con la debida entonación. Más tarde, se les enseñaba música, a cantar y a tocar instrumentos sobre todo la lira y la flauta.
También aprendían a componer poesía y cantarla acompañados de la lira.


A partir de los doce años, la educación física tenía prioridad sobre las demás. Las clases pasaban a impartirse en la palestra (un campo de deportes al aire libre rodeada de una columnata, a cuya sombra se daban las clases teóricas) Los ejercicios se realizaban totalmente desnudos, con el cuerpo ungido en aceite y arena fina (para protegerse de la intemperie). Los deportes se realizaban con música de flauta, y entre ellos destacaban los lanzamientos de disco y jabalina, las carreras, el salto de longitud y la lucha (todos ellos también se realizaban en las Olimpíadas) Al terminar, se daban un baño, y con un rascador se quitaban los restos de aceite y arena.

Las niñas de buena familia recibían, en cambio, una educación muy distinta; apenas pasaban de aprender a leer y escribir y algo de música. Su educación se centraba en las tareas que luego desempeñaría cuando estuviera casada el trabajo en la casa, el cuidado de los niños, la manufactura de los tejidos, etc. Las chicas pobres, por su parte, al igual que los niños pobres, no tenían acceso a ningún tipo de educación.

sábado, 29 de octubre de 2011

Educación en la Prehistoria


La Educación es tan antigua como el hombre mismo. Dicha Educación tiene connotaciones generacionales, esto es la transmisión de modo natural de padres a hijos como por ejemplo el lenguaje. No se hace de una manera consciente, ni los niños ni los adultos reflexionan sobre el hecho. En cuanto los individuos comienzan a darse cuenta y a reflexionar sobre ello la Educación adquiere carácter institucional como por ejemplo la creación de las escuelas atenienses.

La Educación Prehistórica tenía las siguientes características:

• Imaginativa: el joven llega a adulto intentando repetir en su propia vida lo que ve a su alrededor.

• Doméstica: junto a la madre y al padre los jóvenes van adquiriendo los usos, las costumbres, las ideas
religiosas, los ritos y la mentalidad propia de la sociedad a la que pertenecen.


• Global: el sujeto no atiende a enseñanzas del pasado ni a previsiones del futuro; aprende lo que van a
utilizar en su presente.


• Mágica: basan su cultura en su religión, en sus dioses, en sus mitos y todos los elementos que se incluyen
en estos


La mentalidad primitiva hace suponer un escaso desarrollo de las facultades superiores en el hombre. Sin embargo, el aspecto intelectual no está tan atrasado como parece indicar sus groseras costumbres. La inteligencia toma sus elementos de lo que ofrecen sus sentidos. Su vista y su oído aprecian sensaciones que pasan inadvertidas a los hombres de nuestro tiempo. Su educación es concreta, carece de ideas, se instruye por lo hechos y consecuencias naturales de ellos.